El Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid (CPFCM) ha lamentado el “alarmismo” generado por la Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física (SERMEF) al señalar que la derivación directa de pacientes a fisioterapia puede suponer un “gran peligro”.
“Los responsables de SERMEF parece que ignoran las competencias que tenemos los fisioterapeutas. Estamos capacitados para abordar de manera directa numerosas enfermedades o lesiones, sin necesidad de que los pacientes pasen de forma previa por un médico”, ha dicho la decana del CPFCM, Aurora Araújo.
En la Comunidad de Madrid, tal y como ha recordado, la derivación directa en Atención Primaria (AP) lleva teniendo lugar desde que se incluyó al fisioterapeuta en este nivel asistencial. Por ejemplo, un paciente con una lumbalgia, una cervicalgia o un esguince leve de tobillo puede ser derivado directamente al fisioterapeuta de AP desde el médico de familia sin necesidad de pasar por el médico rehabilitador, lo que ahorra mucho tiempo de espera y favorece que las lesiones se aborden en una fase aguda o subaguda, con una recuperación más rápida y una menor discapacidad de esas personas.
“Desde hace años, la fisioterapia española viene reclamando una mayor presencia dentro de la sanidad pública, para mejorar la atención de los pacientes. Dentro de esa labor, la derivación directa se realiza siempre dentro de unos protocolos consensuados entre las distintas profesiones sanitarias que intervienen en cada caso”, ha dicho.
A la vez, la fisioterapia demanda también una mayor presencia dentro de diversos equipos interdisciplinares. “La evidencia científica demuestra que la participación de la fisioterapia está siendo muy beneficiosa en ámbitos de la sanidad pública en los que hasta hace poco no estábamos presentes, como las UCI, tratamientos oncológicos, neurológicos, el abordaje de la Covid-19, etc.”, ha explicado Araújo.
Por ello ha mostrado su sorpresa e indignación por el hecho de que haya algunos grupos de médicos, “cada vez menos”, que sigan resistiéndose a que los pacientes tengan la mejor atención posible. “Se preocupan de sus intereses particulares, no de la salud de las personas; su frivolidad sí resulta alarmante”, ha detallado.
Del mismo modo, los fisioterapeutas madrileños han recordado que la derivación directa de pacientes a fisioterapeutas se viene realizando desde hace años en diversas comunidades autónomas españolas, como Andalucía, Castilla y León o el País Vasco, a partir de protocolos y guías.
“En la Comunidad de Madrid estamos trabajando con la Consejería de Sanidad en esta línea de abrir la derivación directa cuando sea posible, para beneficiar a la ciudadanía de la región. La fisioterapia española cuenta con códigos éticos y deontológicos que impiden que ningún profesional se exceda en sus atribuciones. Sabemos mejor que nadie cuándo podemos tratar una patología y, ante cualquier duda, somos los primeros en derivar ese paciente al especialista adecuado. Decir que la derivación directa a un fisioterapeuta supone un grave peligro es faltar a la verdad y causar alarmismo entre la población”, ha enfatizado la decana del CPFCM.
Finalmente, ha recordado que la Ley de ordenación de las profesiones sanitarias establece que corresponde a las personas tituladas en Fisioterapia la prestación de los cuidados propios de su disciplina, a través de tratamientos con medios y agentes físicos, dirigidos a la recuperación y rehabilitación de personas con disfunciones o discapacidades somáticas, así como a la prevención de las mismas. Entre esa capacitación también está el abordaje a través de ejercicio terapéutico.
Fuente: Noticiasdesalud