Inspirar lentamente y hasta el mayor volumen posible.
Realizar una apnea, pausa, de 1 a 3 segundos.
Espirar con un golpe seco de tos.
En caso de repetir la tos, hacerlo un máximo de 3 veces e intercalando entre ellos una inspiración profunda y apnea.
Respirar tranquilamente en reposo durante al menos 30 segundos.
Hacer de 2 a 3 inspiraciones lentas y máximas, se pueden incorporar apneas al final de la inspiración, acompañadas de espiraciones lentas y máximas.
Repetir el procedimiento de tos desde el punto 1.