El autoestiramiento, también conocido como ejercicios de flexibilidad o estiramiento activo es un tipo de procedimiento que el paciente desarrolla de manera independiente luego de una instrucción cuidadosa y una práctica supervisada. Este modo permite al paciente mantener o incrementar la amplitud de movimiento adquirida. Se trata de una forma de estiramiento que con frecuencia es un componente integral del programa de ejercitación en el hogar, necesario para el manejo individual y a largo plazo de diversos trastornos musculoesqueléticos y neuromusculares.
Es fundamental enseñar al paciente la ejecución correcta y segura de los procedimientos de autoestiramiento para prevenir una nueva lesión o futura distensión. El adecuado alineamiento del autoestiramiento efectivo.
Las pautas sobre la intensidad, velocidad, duración y frecuencia que se aplican para el estiramiento manual también son apropiadas para los procedimientos de autoestiramiento. Un estiramiento estático de 30 a 60 segundos de duración por repetición es considerado el más seguro.