La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha publicado que de las 56,4 millones de defunciones registradas en todo el mundo en 2015, más de la mitad, hasta el 54%, fueron consecuencia de 10 causas principales. En los primeros puestos figuran la cardiopatía isquémica y el accidente cerebrovascular, que ocasionan 15 millones de muertes y han sido las principales causas de mortalidad durante los últimos 15 años.
La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) causó 3,2 millones de fallecimientos en 2015, mientras que el cáncer de pulmón, junto con los de tráquea y de bronquios, se llevó la vida de 1,7 millones de personas. La cifra de muertes por diabetes, que era inferior a un millón en el año 2000, alcanzó los 1,6 millones en 2015. Las muertes atribuibles a la demencia se duplicaron con creces entre 2000 y 2015, y esta enfermedad se convirtió en la séptima causa de muerte en el mundo en 2015.
En cambio, la infección por el VIH/sida ya no figura entre las 10 primeras causas; si en 2000 fallecieron 1,5 millones de personas por esta causa, en 2015 esta cifra se redujo hasta los 1,1 millones. Por último, los accidentes de tránsito se cobraron 1,3 millones de vidas en 2015; tres cuartas partes de las víctimas (el 76%) fueron varones.