Grados 5 (normal), 4 (bueno) y 3 (regular).
Posición del paciente: Sentado, con las rodillas juntas y flexionadas, los muslos apoyados por completo en la camilla y las piernas colgando del borde. El paciente puede usar las extremidades superiores para estabilizar el tronco sujetándose en el borde de la camilla o con las manos a cada lado de la misma.
Posición del fisioterapeuta: De pie, junto con la extremidad inferior sometida a la prueba. La mano se ahueca para aplicar resistencia sobre el muslo distal inmediatamente proximal a la articulación de la rodilla.
Prueba: El paciente flexiona la cadera hasta el final de la amplitud de movimiento, levantando el muslo de la camilla en rotación neutra y manteniendo dicha posición contra la resistencia que aplica el fisioterapeuta en dirección al suelo.
Grado 5 (normal): El muslo se separa de la camilla. El paciente soporta la resistencia máxima.
Grado 4 (bueno): El paciente mantiene la flexión de la cadera contra una resistencia de intensa a moderada. Puede haber cierta «cesión» en la posición final.
Grado 3 (regular): El paciente completa toda la amplitud de movimiento de la prueba y mantiene la posición sin resistencia.