La corriente galvánica es una corriente eléctrica continua, constante, de una tensión de 60-80 voltios, y de una intensidad de hasta 200 mA. Aunque durante el tiempo de aplicación la intensidad de la corriente permanece constante, al iniciar su aplicación (cierre del circuito) asciende paulatinamente y desciende de la misma forma cuando se suspende su aplicación (apertura del circuito)
Esta corriente continua fue la primera que se utilizó en medicina y se denominó galvánica, en recuerdo de Luigi Galvani, quien sentó los principios de la teoría de la electricidad animal, que sirvió para que Volta descubriera la corriente eléctrica y construyera su famosa pila.
Podemos considerar en esta corriente, desde el punto de vista de su utilización, los periodos siguientes:
Periodo de Cierre: Es el tiempo que transcurre desde que se cierra el circuito hasta que llega la corriente a la intensidad previamente establecida.
Periodo de Estado: La intensidad, alcanzando el valor deseado, permanece constante durante todo el tiempo de la aplicación. Es lo que se llama período útil de tratamiento, que corresponde al tiempo que está pasando la corriente eléctrica con la intensidad prefijada.
Periodo de Apertura: Es cuando la intensidad de la corriente, al terminar la sesión, desciende hasta cero de una forma progresiva.
De estos tres períodos en los de cierre y apertura, la intensidad varía durante un corto espacio de tiempo, mientras que en el período de estado permanece constante.