Hay muchas razones por las que los centros de fisioterapia quieren distinguirse de otros negocios y profesionales que ofrecen servicios que pueden parecer similares. Una de ellas es dar una sensación de unidad entre los profesionales del ramo, pero también luchar contra el intrusismo en una profesión en la que “todos dicen ir a fisioterapia, pero no siempre es así y no siempre los trata un fisioterapeuta”, como precisan desde el colegio profesional.
En esta misma línea se expresa Mónika Suszynska, de MS- Fisio, una clínica situada en el número 35 de la calle de la Tierra que se ha convertido en pionera en la comarca y Galicia, puesto que su negocio luce ya la cruz blanca y fucsia que distingue a los profesionales del ramo colegiados y que han de cumplir una serie de requisitos.
“Por lo que me han dicho, la nuestra es la primera que se ha puesto en Galicia. Creo que hay otra en Burela, pero estamos ante algo que es muy novedoso todavía , muy incipiente, supongo que con el tiempo seremos muchos más, o eso espero, los que luzcamos esta cruz”, subraya.
Proyecto iKono
Lo de situar una cruz blanca y fucsia en el acceso a las clínicas de fisioterapia, al igual que ocurre con la cruz verde de las farmacias, no es más que una propuesta del Consejo General de Colegios de Fisioterapeutas de España, que cuenta con el respaldo de todos los colegios autonómicos y que se ha denominado proyecto iKono.
Se trata de una iniciativa pionera que ha llegado ya hace unas semanas a Ferrol, concretamente a la fachada del centro MS-Fisio, que dirige Mónika Suszynska. La cruz en cuestión será blanca y con los bordes en color fucsia. De este modo se pretende unir a los fisioterapeutas titulados que hay en el país, combatiendo también en intrusismo con un sello identificativo propio, “poñendo así en valor o seu traballo, pero tamén visibilizando e creando conciencia social sobre a calidade dos servizos de saúde que se ofrecen á cidadanía, converténdose ao mesmo tempo en símbolo da unidade, profesionalidade e calidade dun colectivo integrado por profesionais sanitarios comprometidos coa saúde e o benestar da poboación”, como subrayan desde el Colexio de Fisioterapeutas de Galicia (Cofiga).
La iniciativa por ahora es totalmente voluntaria, pudiendo adherirse quienes así lo deseen. En el caso de MS Fisioterapia, Mónica, la responsable, asegura que ella no lo dudó cuando el colegio profesional le indicó que existía esa posibilidad. “Yo lo vi genial desde el primer momento, sin embargo, es algo más laborioso de lo que inicialmente pueda parecer y a lo mejor eso no ayuda a que la gente se anime a ello”, comenta.
Asimismo, considera que la cruz sirve al colectivo para remar en la misma dirección y hacer fuerza contra quienes venden servicios de fisioterapia sin ser profesionales. “Por hacer un curso de masajista uno no se hace fisioterapeuta”, apunta, “la gente debe tener claro a simple vista que se trata de un espacio homologado con un profesional titulado al frente o no”.
En su caso, fue enterarse de la existencia de la propuesta y gestionar su petición. El proceso incluye varias acreditaciones, primero por parte del colegio profesional autonómico, y después por parte del Consejo General de Colegios de Fisioterapeutas de España, que envían a personal que comprobará que el centro dispone de la autorización de centro sanitario y las licencias municipales en curso, así como unas instalaciones acordes y que la profesional en concreto acredite los títulos que posee. “En mi caso vinieron en varias ocasiones a comprobar documentación y conocer el centro, porque culminar el proceso puede llevar un par de meses desde que tramitas la solicitud”, apunta la responsable de MS-Fisio.
Para facilitar la adhesión al proyecto iKono, el Consejo General de Colegios de Fisioterapeutas de España pone a disposición de los colegiados gallegos una web (https://ikono.consello-fisioterapia.org) en la que se indica cómo se debe solicitar la cruz, las subvenciones –que también las hay– y la documentación necesaria, como hizo en su día Mónika Suszynska.
Fuente: Diario de Ferrol