La médula ósea es un tejido blando localizado en el interior de algunos huesos del organismo, como el esternón, la pelvis y el fémur.
Consta de una matriz ósea mineralizada, tejido conectivo y distintas células.
La médula ósea está formada por una red de tejido conjuntivo que contiene fibras en forma de malla llena de células. El tejido blando pulposo de la médula ocupa los espacios situados entre las trabéculas de la totalidad de los huesos.
En la médula ósea, el tejido fibroso da soporte a las células progenitoras. En función de las necesidades, las células progenitoras se diferencian para dar lugar a un tipo concreto de célula sanguínea (glóbulos rojos, glóbulos blancos, plaquetas).