Afectan a gran parte de los huesos, pero no a todo el esqueleto.
Ejemplos clásicos son las osteopenias, limitadas a partes del sistema óseo, no a cada uno de los huesos (por ejemplo, la hipodensidad ósea subcondral) de la artritis o la osteoporosis circunscrita). Otros casos se refieren a los huesos de la mano o a las deformidades que se observan en los huesos de la misma