La Asociación Española de Fisioterapeutas (AEF) muestra en un comunicado su «preocupación y malestar por las graves consecuencias económicas que, a raíz de la pandemia por Covid-19, están sufriendo con mayor severidad los fisioterapeutas de centros concertados que prestan servicio a usuarios de compañías aseguradoras y mutuas de salud».
Al que califican de “endémico problema de las tarifas excesivamente bajas que este tipo de compañías de seguros abonan habitualmente por los servicios de Fisioterapia (una media de 5 euros por sesión, independientemente de la patología y de la duración de los tratamientos)”, desde la AEF denuncian que ahora, con la crisis sanitaria provocada por el coronavirus SARSCoV-2, se suman las «dificultades que estos centros concertados encuentran para que les sean abonados los tratamientos efectuados durante el estado de alarma decretado a causa de la pandemia, bien presencialmente o bien con videoconsultas realizadas a través de medios telemáticos, una modalidad instaurada a causa de la crisis sanitaria y que se ha incrementado notablemente».
Además, la implementación de nuevos protocolos de actuación en los centros sanitarios exige limitar la actividad asistencial, «limitando la concurrencia de usuarios y programando tiempos de desinfección tras cada tratamiento, lo que repercute directamente en los costes que se derivan de la atención de cada proceso, circunstancia que no es atendida por las aseguradoras».
“Se trata -afirma Fernando Ramos , presidente de la AEF- de una situación inequívocamente injusta, dado que las compañías aseguradoras y mutuas de salud continuaron cobrando las primas de las pólizas a sus asegurados, en un periodo en el que una parte importante de los tratamientos programados fueron aplazados, con el consecuente ahorro que supuso este hecho para las compañías”.
Presión desde el sector asegurador
“La Fisioterapia es una de las profesiones sanitarias más valoradas y demandadas por la sociedad, con demostrada costo-efectividad en sus intervenciones, por lo que constituye un servicio del que las compañías aseguradoras y mutuas no pueden prescindir”, subraya el presidente de la AEF. “Si a esto añadimos la escasa cobertura de Fisioterapia que ofrece el Sistema Público de Salud –agrega-, la Fisioterapia constituye una considerable fuente de beneficios para las compañías aseguradoras, situación que no ven traducida en las tarifas que ofrecen a los fisioterapeutas por la prestación de sus servicios al asegurado”.
La preocupación del colectivo de fisioterapeutas «por la mejora de la calidad de los tratamientos de Fisioterapia que prestan contrasta con la creciente presión de la gran mayoría de compañías de seguros de salud por reducir costes».
“Esta anómala situación está obligando a los centros de Fisioterapia concertados a trabajar con tarifas por debajo del precio de coste de cada tratamiento, ejerciéndose sobre ellos lo que podría ser considerado como una explotación abusiva basada en la posición de poder de las compañías, con imposición de condiciones comerciales poco equitativas”, sostiene el presidente de la AEF.
Fuente: Redacción Médica.