REFLEJO TÓNICO ASIMÉTRICO DEL CUELLO: Se analiza en decúbito supino. Al girar la cabeza del neonato hacia el lado izquierdo, el brazo de ese lado se extiende y el del lado opuesto se flexiona.
En los miembros inferiores también hay una modificación postural quedándose dichos miembros cruzados. Esta postura también se conoce como “reflejo del esgrimista”.
Desaparece a los 3 – 4 meses y la persistencia de este signo puede levantar sobre una afectación del Sistema Nervioso Central.
REFLEJO DE LANDAU: Se observa al niño suspendido en posición dorsal. El tronco se endereza, la cabeza se eleva y los pies y los brazos se extienden.
Aparece alrededor de los 4 meses y persiste hasta el último trimestre del primer año.
REFLEJO DEL PARACAIDAS: Se mantiene el niño en suspensión ventral, sujeto por los costados y se le inclina bruscamente hacia delante.
Los brazos se extienden por reflejo como para protegerse de la caída y se produce una apertura de manos.