Investigadores de la Universidad de Valladolid, han desarrollado un videojuego basado en el sensor Kinect para que pacientes que han sufrido un ictus puedan realizar ejercicios de rehabilitación para controlar el equilibrio.
El paciente se sitúa frente al sensor, que reconoce sus movimientos, y en un televisor observa las distintas posturas que tiene que adoptar.
En el juego aparece la silueta de una persona en una determinada postura. Esta silueta cada vez se acerca más y el paciente tiene que colocarse de la misma forma hasta que encaje en la silueta.
Se trata de buscar inestabilidades para trabajar el equilibrio del paciente y para ello se puede incluir elementos externos como cintas, bosus.
El sistema genera un historial del usuario con las puntuaciones que obtiene en los distintos juegos y ofrece al fisioterapeuta información adicional que le permitirá conocer la evolución del paciente.