Investigadores de las Universidades canadienses de McMaster y McGill han observado que el uso de agua salina puede ser más eficaz para limpiar las heridas y prevenir infecciones que el agua con jabón.
Los resultados, que se publican en New England Journal of Medicine, podrían suponer un ahorro significativo del gasto sanitario, en especial en países en desarrollo donde las heridas abiertas son más comunes.
En el trabajo se incluyó a 2400 personas con heridas abiertas en brazos o piernas. Para limpiarlas se optó por agua con jabón o agua salina, y se probaron tres niveles de presión. Así se observó que el uso de agua salina con una presión más baja era una alternativa aceptable para limpiar las heridas y la tasa de reintervención fue mayor en el grupo que utilizó jabón.