La vibración de cuerpo completo (VCC) se considera una modalidad alternativa de ejercicio para aumentar el rendimiento físico, mejorando la actividad muscular.
Se ha convertido en un complemento, tanto de las tradicionales formas de entrenamiento, como de terapia en los problemas de salud.
Se utiliza para aumentar la capacidad funcional, la producción de hormonas o las propiedades del hueso y, más recientemente, para apoyar la rehabilitación de personas con trastornos neurológicos.
Los efectos fisiológicos de la VCC no están definitivamente claros, por ello se sigue investigando.