Es voluminoso, más corto y más grueso que los otros metatarsianos. Su base presenta una superficie articular semilunar, cóncava, con eje mayor vertical, y dos eminencias, los tubérculos interno y externo.
El tubérculo interno se sitúa en la extremidad posterior del borde interno del hueso y en él se inserta un fascículo del tibial anterior.
El tubérculo externo, también llamado apófisis o tuberosidad del primer metatarsiano, es más saliente que el interno, prominente hacia abajo, afuera y un poco hacia atrás; en él se inserta el peroneo lateral largo.
La cabeza del primer metatarsiano es voluminosa, aplanada de arriba hacia abajo. Presenta en su cara inferior dos depresiones, en relación con los huesos sesamoideos.