Son programas nutricionales hipocalóricos, equilibrados y saludables, combinados con actividades físicas aeróbicas, estimulando la pérdida máxima de tejido graso y mínima de tejido magro. Son sostenibles si la persona está preparada psicológicamente, y adopta el programa como parte de un estilo de vida saludable, sistemático y personalizado para toda la vida.
Los programas ideales para disminuir de peso corporal, con una combinación de una dieta saludable hipocalórica y el ejercicio físico aeróbico, tienen la siguiente característica:
-Ingesta calórica no menor de 1200 Kcal/día para adultos. Ese requisito puede cambiar para los niños, ancianos, gestantes y deportistas. Las comidas deben ser distribuidas en pequeñas cantidades y repartirlas en cinco o seis veces al día.
El porcentaje de los macronutrientes sigue las recomendaciones de la OMS (Carbohidratos 55-60%, grasas 25-30% y 12-15% proteínas).
-En las dietas hipocalóricas comprendidas entre 1200-2000 calorías el porcentaje de proteínas pudieran estar discretamente aumentado para satisfacer los requerimientos mínimos, con un porcentaje importante de aminoácidos de origen vegetal.
–No ingerir bebidas alcohólicas. Recordamos que un gramo de alcohol produce 7 kcal. La ingestión excesiva de alcohol acelera el incremento de la ingestión calórica por dos vías: una foram directa, por su aporte rico en calorías y otra por acompañarse con refrescos y comidas extras.
-La hidratación es muy importante para la termorregulación. Se recomienda consumir 2,5 l/día de agua para una dieta aproximada de 2000 calorías/día.
-Garantizar un balance calórico negativo que no exceda entre 500-1000 kcal/día. Esa perdida gradual de peso no produce alteraciones metabólicas. La perdida máxima de peso debe ser de un kg/semana. Es ideal disminuir a un ritmo de 0,5-1 kg/semana.
-Emplear técnicas de modificación de conductas para identificar y eliminar los hábitos que contribuyen a una alimentación inapropiada.