La artrodesis o fusión quirúrgica de una articulación es el último recurso para situaciones en las que no se puede salvar la función de una articulación o realizar la sustitución prótesica.
Esta fusión se consigue al puentear la articulación mediante el fijador que la mantiene bajo fuerte presión; normalmente, la compresión cerrada es suficiente para obtenerla, pero en otros casos es necesario actuar sobre la superficie articular antes de realizar la compresión.
El periodo durante el cual se mantiene el fijador varía entre 3 y 6 meses, según la articulación que estemos tratando, y si debió realizarse alguna intervención previa o simultánea, como el retiro de una prótesis.