La anestesia ofrece a la mujer la ventaja de dar a luz sin sufrir, pero por otro lado expone una serie de riesgos y complicaciones relacionadas con la anestesia.
-La actividad contráctil se inhibe y a menudo resulta necesario recurrir a la estimulación con oxitocina.
-El tono muscular se reduce, dificultando el movimiento de rotación del feto para adoptar la postura correcta.
-El porcentaje de partos en los que es preciso recurrir a la ventosa o a la episiotomía se triplica respecto a aquellos sin analgesia.
-El periodo de expulsión se prolonga. La mujer no siente el deseo de empujar y tiene dificultad para controlar sus músculos abdominales.