Consiste en la aplicación de una presión intermitente de dirección perpendicular al segmento que se va a tratar. Se intenta que la frecuencia sea lo más alta posible, pero manualmente no se llegan a superar los seis ciclos por segundo.30
Durante la aplicación de la vibración las manos (o los dedos, si fueran éstos los efectores de la maniobra) no pierden contacto con la piel o el cabello del paciente (en la aplicación craneal, las manos no descansan sobre el cuero cabelludo, sino que se entrelazan con el cabello, y es éste el que transmite la vibración).
La vibración se realiza mediante pequeñas contracciones de la musculatura del antebrazo, manteniendo brazo y hombro únicamente la tensión necesaria para estabilizarlo.